MONTE DAMAVAND (5.610 msnm) - IRÁN | centro excursionista de caudete

Ascensión al Monte Damavand (5.610 msnm). Irán.

Monumento al montañero en Polour, señalando al Damavand.

El Damavand es la máxima altura de Irán y el volcán más alto de Asia. Enclavado dentro de la cordillera de los Alborz o Elburz, todavía existe controversia en cuanto su altitud pues en la mayoría de mapas aparece con 5.671 msnm, pero las últimas mediciones que ofrece el organismo iraní competente arrojan 5.610 msnm, siendo esta última la altitud que al parecer se ajusta más a la realidad. Se trata de un volcán dormido, aunque con actividad de emanaciones gaseosas, cuya última erupción se registró hace aproximadamente 7.000 años. Durante el verano su ascesión es más asequible pues su propia geotemperatura debido a la actividad volcánica y el riguroso calor estival no permiten que se acumule demasiada nieve, sin embargo en invierno el panorama es radicalmente distinto, convirtiéndose en una montaña muy dura debido al extremo frío, el viento y la nieve, provocado todo ello por las corrientes de viento procedentes de la estepa central asiática, lo que hace que muy pocos montañeros se atrevan a subir durante el invierno. Cuando los rigores del frío bajan en abril y mayo muchos esquiadores aprovechan la acumulación de nieve para bajarlo.

La expedición se ha realizado en la primera semana de agosto del 2016 conjuntamente con el Centro Excursionista de Yecla. La llegada a Teherán se produjo el 31/07/2016 de madrugada y el plan de ruta era el siguiente: Día 31/07/2016 Teherán - Polour (población desde donde parte la subida por la cara sur) - Goosfand Sara (3.000 msnm); día 01/08/2016 Goosfand Sara - Regugio New Hut (4.200 msnm); día 02/08/2016 Aclimatación en New Hut; día 03/08/2016 New Hut - Cumbre (5.610 msnm) - New Hut; día 04/08/2016 New Hut - Polour - Teherán. El tiempo era cálido y soleado, alcanzando el termómetro 40 º C en Teherán.

Día 31/07/2016

Desde la estación de autobuses Este de Teherán tomamos un autobús de línea que en algo más de dos horas nos deja en Polour, una pequeña localidad desde donde parte la ruta más conocida de ascensión por la cara sur y aprovechamos para comprar, comer y alquilar el vehículo 4x4 necesario para aproximarnos al primer refugio, Goosfand Sara (3.000 msnm). Antes de iniciar la ruta es indispensable pasar por el refugio de la federación de montaña iraní situado a la salida de Polour para pagar el acceso al parque natural, cuya tarifa es de 50 dólares USA (45 euros). Se aceptan riales, dólares USA o euros. El cambio aproximado es de 33.000 riales por 1 euro. Te dan una cartulina que conviene guardarse pues la piden en el refugio New Hut.

Una vez llegamos a Goosfand Sara encontramos a varios montañeros que bajan de la cumbre y nos indican que ayer llovió y se espera buen tiempo durante los siguientes 3 o 4 días, incluso demasiado caluroso. Con buen tiempo y estando fuertes la previsión para hacer la ruta de mañana la estimamos en 4 - 5 horas (sin contar descansos). El ambiente es tranquilo, sólo estamos nosotros en el refugio y hay un par de tiendas fuera. Durante la noche reina la calma y hace calor.


Primera imagen del Damavand


Aspecto de la cumbre desde Polour.


Nuestro transporte

Comida tradicional en Polour en un restaurante punto de encuentro de los montañeros, Koohestan Cafe


Control de acceso al parque natural


Mezquita del refugio Goosfand Sara

Típica imagen con la cúpula dorada de la mezquita

Ai-ho ai-ho... a casa a descansar!


Tomando un té con la familia encargada del refugio


Nuestra suculenta cena

Día 01/08/2016

Amanece, que no es poco, en Goosfand Sara y nos tomamos las cosas con relativa calma. Preparamos las mochilas para subir con nuestras pertenencias y unos sacos de comida y agua para que los suba una mula hasta el siguiente refugio. El día es soleado y hace calor, sin embargo no nos incomoda durante la subida. Estamos bien de fuerzas y se nota, por lo que tardamos algo menos de 4 horas en llegar al refugio New Hut (4.200 msnm), una sólida construcción de piedra con capacidad para 60 personas y bar restaurante regentado por unos afganos. Existe otro refugio más antiguo que apenas se utiliza y hay unas terrazas en la ladera preparadas para colocar tiendas de campaña. El refugio cuenta con helipuerto.

Después de comer aparecen los primeros síntomas del mal de altura con un leve dolor de cabeza. Mientras que unos optan por descansar, otros iniciamos una subida lenta y pausada con la intención de mejorar la aclimatación. Hablamos con montañeros que han bajado y nos comentan que han tenido buen tiempo y que han tardado 7 horas en subir. La amplia mayoría de los presentes son iraníes, aunque hay un grupo de franceses y otro de alemanes. Las previsiones dan buen tiempo.

Como es norma cenamos temprano y decidimos que si al despertarnos estamos todos bien descartamos el día de aclimatación e intentamos hacer cumbre. Todo dependerá de cómo pasemos la noche y de los síntomas de mal de altura que podamos tener. Físicamente estamos todos bien de fuerzas y muy mentalizados para subir.

Refugio New Hut desde Goosfand Sara


El Damavand al amanecer desde Goosfand Sara. Se observa una lucecita que es el refugio de New Hut


Amanece, que no es poco


Vivac

La fauna del Damavand


Vista general del campo base


Literas en New Hut


Altitud en New Hut


Preparándonos para la cena en New Hut

Día 02/08/2016

Nos despertamos a las 3 de la madrugada para desayunar y preparar nuestras mochilas de ataque. Nadie presenta síntomas graves de mal de altura por lo que a las 4 iniciamos la subida junto con otros grupos de montañeros. Sorprendentemente la temperatura es agradable y los primeros metros de ascensión los hacemos a buen ritmo.

Cerca de las 9 de la mañana el panorama cambia, comienzan a aparecer el cansancio y los primeros síntomas moderados de mal de altura, la temperatura desciende y el viento hace acto de presencia. Cuando llegamos a la cota de 5.200 m nos encontramos muy cansados y pensamos en que este sería nuestro día de aclimatación según el plan inicial pero que podemos seguir hasta la cumbre.

El viento hace bajar todavía más la sensación térmica, pero por otra parte nos ayuda a atravesar el campo de fumarolas apartándonos los vapores sulfurosos del volcán. El cansancio se nota mucho y nuestro ritmo de subida baja considerablemente. El grupo que iba cohesionado se va estirando hasta formar dos grupos. Los últimos metros se hacen eternos. Al final hacemos cumbre tras 7 horas de subida. Parece que al estar en la cima el cansancio desaparece un poco, pero lo volvemos a notar en la bajada.

Llegamos al refugio y optamos por quedarnos esa noche para descansar. Ya bajaremos al día siguiente hasta Teherán.

Reponiendo fuerzas

Atravesando el campo de fumarolas, el azufre inunda el ambiente

El último escalón


Panorámica de la cumbre


El cráter


Un saludo desde la cumbre

Cascada de hielo


Refugio 4.200 msnm

Día 03/08/2016

Durante la madrugada fuertes rachas de viento golpean las ventanas del refugio, al parecer se ha movido una ventisca. Sobre las 3 de la madrugada los montañeros que se levantan para preparar su ascensión se dan de cara con la realidad: hay tempestad de viento y nieve. Tal es el panorama y la previsión que muchos se vienen anímicamente abajo ya que no van a poder subir hoy y tendrán que esperar. Al amanecer un manto blanco lo cubre todo, la visibilidad en las laderas es nula y se descubren los primeros estragos producidos por el viento en tiendas de campaña. Abajo en el valle está lloviendo. Hemos tenido suerte pues según nuestro plan inicial este era el día señalado para atacar la cumbre, pero al habernos encontrado bien de fuerzas decidimos acertadamente subir en el día de ayer. Una vez más la montaña marca las pautas y decide si puede subirse o no.

Abandonamos el refugio con temperaturas bajo cero y mucho frío. Iniciamos el descenso hasta Goosfand Sara, donde esperaremos a ser recogidos por el 4x4 y acabar con la ruta inversa a la de subida: traslado hasta Polour, parada para comer y en autobús de línea hasta Teherán, donde llegaríamos a las 5 de la tarde y donde el termómetro nos recibió con 40 º C. Las diferencias térmicas han sido abismales. Todos contentos por haber logrado el objetivo sin lamentar contratiempos de ningún tipo nos vamos a cenar a un restaurante de cocina tradicional iraní, deseando brindar con vino o cerveza... pero estamos en la República Islámica de Irán.