
Continuación de la "crónica alpina". Durante la estancia en el refugio Torino aprovechamos para realizar la arista de Rochefort, que probablemente sea la arista más bella de os Alpes. Días después se realizó en Valgrisenche la ascensión del Grand Sassiere. La escalada supuso 17 horas de actividad porque se subió la integral de la arista, afilada tanto en nieve como en roca. Dos días después, aprovechando que no había tanto viento en el Mont Blanc, subimos desde la cabaña que hay a 2700 metros. Salimos a la 1 de la madrugada y llegamos a la cumbre sobre las 9. De descenso nos esperaban 3000 metros...